Museo de Silverio.
año 2000.

(Cerrado año 2005)

Silverio junto a su "Molino"

El Museo de Silverio es una de esas pequeñas ‘joyas’ que podemos encontrar en Higueruela.

  Silverio Martínez Fernández (12-02-1928) es todo un personaje en nuestra población, de carácter afable, buen conversador, y con un espíritu inquieto. En la actualidad jubilado, padre de tres hijas y abuelo de nueve nietos. Todos ellos viviendo fuera de Higueruela.

A conseguido, con mucho tiempo y esfuerzo, cambiar la fisonomía del Camino del cementerio. Comenzó plantando pinos, en una parcela de su propiedad, lindera con esa ruta de acceso al Campo Santo, después, con un estilo muy personal, construyó un pequeño molino de viento, dentro de esa parcela. Recuperó y transportó unos comederos de las caballerías, transformándolos en ficticios pozos con garrucha, y junto a estos tiene su “Museo”.

Según nos comentó el propio Silverio comenzó la colección de objetos que posee de forma casual, aquellos útiles o herrajes de su propia casa, que quedaban en desuso, le costaba desprenderse de ellos y los fue guardando. Otro sitio de donde consiguió piezas, era de las casas que por la emigración quedaron abandonadas y en ruinas. Sabedores de su afición, algunas personas le han regalado objetos, que gracias a esta afición se han librado de desaparecer en algún vertedero.

Llegó un momento en el que tuvo la necesidad de colocar, ordenar y clasificar estas piezas. Para ello se construyo un local, original en su forma triangular, que solucionó el primer problema, colocar todas las piezas que forman la colección. Colgadas en sus paredes, o instaladas en el suelo, pueden ver toda clase utensilios, herramientas de labranza, aparejos para animales, vasijas de cerámica, toscas ruedas de molino, faroles, calderos, cuchillos, trillas, una foto de Adolfo Suárez. (Político).

Se atreve incluso con la literatura, sorprende ver colgado en una de las paredes, un papel forrado de plástico con una preciosa poesía escrita por D. Juan José García Carbonell, dedicada a la navaja de Albacete.

Queda pendiente ordenar, clasificar e incluso si se pudiera inventariar todos los objetos.

Es este museo una verdadera fuente etnológica, viendo y estudiando los objetos, podríamos analizar, costumbres, formas de trabajo, cultura, y todo ello relacionado con nuestro pueblo, ya que todos los elementos que lo componen han sido recuperados de nuestro entorno. 

Algunos carteles hechos con ordenador, ponen al corriente a los profanos de los nombres y para que se utilizaba cada objeto. La mejor forma de visitar y comprender este singular museo, es ir acompañado por su dueño, de esta forma, vives la historia que lleva interna cada objeto. "Esta rueda de piedra me la dio tu 'cuñao' Diego Bueno que se la encontró en el Sobralejo, debe ser de un viejo molino para el trigo". El 'collaor' este es de la mula de "Abarcas". Etc. Etc.

Quizás podamos un día insertar en esta página la lista de elementos, de que se compone, si podemos hacer un inventario.
P.D. Silverio Martínez Fernández (1928-2005) desde entonces permanece cerrado