Aquilino Gómez Navalón Rincón del arte
    La Breña.

Llevan tus aires el cálido aliento
de los breñales que forman tu suelo,
donde las aves remontan el vuelo
batiendo fuerte sus alas al viento.

En la Breña:¡Qué dichoso me siento
viendo su fuente regalo del cielo!
Agua cantarina que es dulce anhelo
de quien llega sudoroso y sediento.

Tu campo, las montañas, el camino,
todo me alegra, lleno está de vida:
soy de tu tierra un viejo peregrino.

A la paz del espíritu convida,
y en el ocaso, el lucero vespertino
besa con amor... a mi alma dormida.

(1984)

volver                Aldeas