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Año 2012
Jubilación de Cándido Marín.
20 de julio 2012.
El pasado día 20 de julio 2012, se nos jubiló Cándido Marín, con 65 tacos a las espaldas, dijo adiós al mundo laboral. A ese mundo que le llevó a ser Ayudante de sastre, sastre titulado, después de estudiar el oficio en Barcelona, peluquero de caballeros, vendimiador en Francia, donde también ejercía las labores de contratación de personal para dicho trabajo, autorizado por "los amos franceses, con los que aun conserva su amistad y aprecio. Auxiliar de Farmacia, antenista, operador de cine y Músico de la Banda de Higueruela, y también criador de Canarios y amaestrador de pájaros.
El restaurante Los Ángeles, fue el lugar elegido para la cena de homenaje, y Antonio, su dueño, se esmeró, como siempre, en conseguir que cerca de 60 personas pasaran una velada agradable.
La tarea no era fácil, ya que el anfitrión, digamos Cándido, puso en la misma mesa, políticos de todos los colores, militares, personal de seguridad, médicos, agricultores, maestros, ganaderos, empleados de la banca, jefes de obra, industriales zapateros, farmacéutico, vinateros, cirujanos, antenistas, funcionarios de la administración, hosteleros, veterinarios, locutores de TV y radio, y unos cuantos jubilados.
Los discursos fueron cortos y amenos, y las fotografías que proyectó su primo Juan, el hijo pequeño de Porfirio, nos recordaron momentos familiares.
Al final Cándido,se vio un poco "precisao", con el número final de la noche.
Desde esta página le deseamos que no se jubile del todo y siga colaborando con nosotros, cuando quiera y pueda. También le deseamos que su vida sea tan larga y buena como la de su padre"Paco Marín" (aminguez).
Romancillo de la jubilación de Cándido:
En el bar de Antonio el Pollo,
o sea, en el de Angelete
nos reunimos con Cándido
que nació el cuarenta y siete,
y vamos a celebrar,
como manda la ocasión,
entre todos los amigos
su feliz jubilación.
¿Qué os diría yo de Cándido
que todos no sepáis ya?
Destaca entre sus virtudes
ser un hombre servicial,
simpático, campechano,
observador y guasón,
amigo de sus amigos
y un puntico socarrón.
Y aunque él es bastante “amable”,
en honor de la verdad,
hay otros en su familia
que lo son bastante más.
Se junta con todo el mundo
porque es un hombre sin tacha
aunque alguno te dirá
que tira un poquito a facha.
Le gustan las tortas fritas,
el forro y las creadillas.
Si quieres verlo feliz
ponle un plato de natillas.
Como el pobre se pasó
en unos kilos demás,
ahora está haciendo dieta
con fuerza de voluntad:
ha suprimido los chambis
y muchas cosas sabrosas;
para cenar sólo toma
un pinchito con gaseosa.
Está muy bien informado
de lo propio y de lo ajeno
y tiene su observatorio
en el banco del Maleno.
Ejerció de “boticario”
de sastre y de peluquero
y cuando era algo más joven
músico y peliculero.
Y si quisieras saber
si es de izquierdas o derechas
él te dirá que las cosas
le gustan siempre bien hechas.
Le van el baile y la música;
yo no lo he visto bailar.
También le va la política
y no ha sido concejal.
Pero lo que más sorprende
es que su amigo Belmar
le hable siempre de mujeres
y no lo pueda casar.
Por consejo de Jacobo
se compró una bicicleta
pero está sin estrenar
colgadita en casa, quieta.
Dice que la montará
por ver la Naturaleza.
_¿ Vas a entrar en el equipo?
_ ¡Quiá! Aún no he perdido la cabeza.
Médicos y boticarios,
albañiles y cajeros,
Guardia civil sin tricornio,
peones y zapateros,
amigos aquí presentes
levantad todos la copa
y brindad esta ocasión
para desear a Cándido
próspera jubilación.
Pepe Colmenero.
Higueruela, 20 de Julio de 2012.
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